viernes, 13 de febrero de 2015

Opium, comamos, bebamos y bailemos

Aterriza en Madrid Opium, un concepto de cena y fiesta que me parece de lo más interesante, porque en sitios como en Marbella funciona de maravilla. Si están pensando en cenar con amigos y después quemar la pista de baile, esta es una buena opción. Lo de quemar la pista de baile digo.




Opium te recibe entre blancos y negros y algún dorado. Mesas perfectamente vestidas con unas mantelerías de hilo que ya me gustaría tener a mi aquí en casa. También alguien que las planchase, claro está. Ambiente tranquilo, luz muy tenue para mi gusto pero perfectamente enfocada a lo que allí importa, los platos.




Empezamos con una crema de setas de temporada muy buenas, con un buen chorrito de aceite que eso es un plus en cualquier plato.




Nems o rollitos de verduras con salsa agridulce y módena. La menta le da un puntazo pero es un plato que no me sorprendió mucho más.




Croquetas de jamón ibérico siempre son un acierto. Bien crujientes por fuera y cremosas por dentro.




Burrata (de la de verdad) con tomates cherry y albahaca. Un plato muy fresco al que yo le pondría unas gotitas de lima.




Tataki de atún con brotes de soja y una cama de guacamole. Perfecto para acompañar unas buenas tostadas.




Este plato me volvió loco. Canelón de faisán con foie y trufa. Estaba brutal, si vais, no dejéis de pedirlo. Salsa buena y una jugosidad por dentro que se te caían las lágrimas, aunque sabe mejor de lo que huele por la combinación de los ingredientes.




Bacalao negro con miso y salsa yuzu. Venía acompañado de edamame que me puedo comer 100kg de una sentada. El bacalao estaba perfectamente hecho y me recordaba en cierta manera al pato laqueado por fuera.




Y para acabar con los salados, solomillo de ternera con patata gratín. Me encanta que las patatas las acompañen de un trocito de pimiento verde, ¡es un plus!




En los postres saqué mi lado más innovador y pedí sal Maldon. Si acompañas de un peñizco a este surtido de chocolates, el resultado es excepcional. Y si ya te dejan ponerle un chorrito de aceite...en fin, mucha suerte para convertirlo en sudor al día siguiente en el gimnasio.




Para brindar un cóctel con fruta y un toque de lima. El ambiente muy agradable y una oferta muy interesante para extranjeros y gente que quiera tomarse la primera (y la última también) copa allí, porque después te vas a bajarlo a la pista de baile. Precio en torno a 70€.

Situado en C/ José Abascal 56, Madrid

Consejo nutricional: El miso es una pasta que sale de la soja, de su fermentación, aunque también se hace apartir otras legumbres. Aporta alta cantidad de proteínas (atentos veganos) y es bajo en grasas.

1 comentario: